Se cuenta que Ramón María quedó manco en una pelea en un café, va a ser que tanta exaltación al final no le fue muy favorable. Choca la calma de Antonio siendo sevillano, debió ser que vivir en Madrid y Paris templaría sus raíces.
Me gusta como en un mismo emplazamiento se pueden ver esos contrastes entre las mesas. Eres un fenómeno Félix.
Por cierto, acabo de fijarme en el quiosco con el cartel de la asociación jeje. Un gran detalle.
Un saludo.