“El Vadal constrictor” vive en lo más profundo de la espesura de los bosques, es un voraz depredador de emboscadas, hábilmente prepara sus trampas haciendo uso de todo tipo de señuelos que con gran destreza prepara, vigila y protege, posee una fuerza descomunal y es capaz de triturar en pocos minutos a presas de gran tamaño, osos pardos, pumas e incluso humanos son sus presas más habituales.
Durante su época efervescente luchará con los machos de su especie buscando asentarse en un territorio, en el cual echará raíces y allí pasará su madurez, aproximadamente 100 años gozara de su territorio hasta que los jóvenes Vadales comiencen a darse cuenta que ya no es una amenaza para ellos y sientan que pueden arrebatarles el territorio.