Seguimos con algunos de los componentes de un cortejo procesional, en esta ocasión toca:
Acólitos:
Se diferencian en acólitos ceriferarios y turiferarios, se les suele llamar en conjunto "servicio de paso". Los acólitos ceriferarios son aquellos que portan un cirial y tienen su origen en los inicios de la Semana Santa, sirviendo como luz para alumbrar las pequeñas andas en las que iban las imágenes. Por eso deben ir inmediatamente al lado del paso o actualmente justo delante del mismo, ya que forman parte del servicio del mismo. El color de las velas de los ciriales siempre debe ser el mismo que porte el paso que lleva detrás. Digamos a modo de alegoría que si el Paso es el Altar, los acólitos son el Presbiterio. En la mayoría de las hermandades suele haber de cuatro a seis acólitos ceriferarios. Los acólitos turiferarios portan los incensarios, la naveta y el canasto, y son aquellos que impregnan de incienso todo el lugar inmediatamente cercano al paso, haciéndose así como si el paso se tratara de un altar. Hay que tener en cuenta que el uso del incienso está reservado para la Eucaristía y las imágenes de Cristo y de su Santa Madre. En algunos sitios a los acólitos se les llama Dalmáticas, en referencia a la prenda que en algunos sitios utilizan.
TURIFERARIOS:

CERIFERARIOS: