Origen del costalero sevillano:
LOS “GALLEGOS” El significado principal y primitivo de la palabra costalero debemos adscribirlo a un oficio que existió en Sevilla varios siglos y que era el de las personas que se dedicaban a la carga y al transporte de pesados bultos tales como pianos o granes muebles durante todo el año.

Sin embargo, estos fornidos trabajadores no eran conocidos con el apelativo de costaleros sino de “gallegos”. No debemos pensar de que esta denominación de “gallego” designa la procedencia geográfica de estos cargadores, es una referencia puramente gremial.
Estos “gallegos” serán los que porten los pasos sevillanos durante cuatro siglos ya que eran los faeneros perfectos para cargar con los pasos en los días sacros, días que no dejaban de ser para ellos una continuación de su oficio diario, lo único que cambiaba es que en Semana Santa la carga era “sagrada”.

En 1930 aproximadamente desaparece el apelativo de “gallego” para referirse ya al costalero propiamente dicho como persona que llevaba los pasos de la Semana Santa Hispalense. Comienza un nuevo ciclo, el del llamado “costalero profesional”, hombre que se forja en el muelle del puerto sevillano y en el mercado de la Encarnación.
Malos tiempos corrían para los costaleros profesionales en los albores de los setenta. Las constantes reivindicaciones salariales por parte de estos a las juntas de gobierno crearon un ambiente de crispación en el que se hacía urgente el encontrar una solución al elevado coste económico que suponía al encontrar una cuadrilla de profesionales.

Un grupo de jóvenes entusiasta, en su mayoría estudiantes, portó el paso del Cristo de la Buena Muerte de la Hermandad de los Estudiantes en el Martes Santo de 1973, siendo la primera cuadrilla de Hermanos Costaleros que procesionaba en la Semana Santa de Sevilla. Estas cuadrillas de hermanos costaleros no profesionales fueron desbancando paulatinamente a los profesionales de las trabajaderas, hasta prácticamente 1985 donde la mayoría de los pasos contaban con hermanos o personal no asalariado.

Los costaleros cargan el peso sobre su cuello, concretamente sobre la séptima vértebra cervical, y protegen esta zona con una tela llamada costal, fundamental para su labor, que puede ser desde arpillera hasta decruz de punto. Los elementos del paso adaptados para que los costaleros carguen el peso son las trabajaderas. Estas, en número que varía en función del tamaño del paso, son los palos que lo cruzan transversalmente y que se colocan a diferente altura (de más a menos) para dar cabida a los costaleros según grupos de estatura semejante.


En algunas ciudades y hermandades hay mujeres costaleras e incluso cuadrillas compuestas exclusivamente por mujeres
