Los viajes de Marco Polo o el Descubrimiento de América supusieron para Europa asomarse a la puerta del Mundo, así los más audaces se arriesgan a conquistar un imperio, a evangelizar paganos o a buscar gloria y fortuna.
Sin embargo la audacia no es suficiente para dominar a muchedumbres que los superan por miles y cientos de miles, por elo surge la idea de utilizar a los propios nativos para defender el nuevo poder, ya sea estableciendo alianzas basadas en viejas rivalidades (caso de los tlaxcaltecas aliados de Cortés), bien sea organizando milicias integradas por nativos que, armados, equipados y adiestrados por los colonizadores en el manejo de las armas modernas, se convirtieron en excelentes colaboradores.
La época colonial alcanza su apogeo en un momento histórico en el que las armas de fuego no tienen ni el desarrollo ni la precisión que aumentarían luego su poder mortífero.
Así pues esa poca "efectividad" de las armas permitió que a la hora de diseñar los uniformes de las tropas indígenas pudieran permitirse que fantasía y color permitieran una uniformidad vistosa.
La combinación de la moda militar en Europa y los trajes típicos de los nativos brindan unos uniformes, inservibles para el camuflaje, pero de una vistosidad y gusto que aún hoy nos dejan maravillados.
Como dato curioso comentar que los negros tuvieron su aportación a estas tropas, pero que en España nunca recibieron el nombre de negros, eran las compañías de morenos (negros) libres (de la Habana, de Veracruz, de Santo Domingo...) o de pardos, que es como se denominaba a los mulatos.
Atte.s.s.s.