El miércoles 8 de marzo de 2006 fue la fecha oficial de lanzamiento al mercado del Audi Q7, que se ofrecía en dos versiones, gasolina y diésel. Este nuevo modelo de Audi ya se había presentado al público un año antes, en la 61ª edición del Internationale Automobil-Ausstellung (Salón Internacional del Automóvil), una importante cita para el sector automovilístico que tiene lugar cada dos años en la ciudad alemana de Frankfurt durante el mes de septiembre.
El Grupo Feser-Graf -una de las mayores y más importantes cadenas de venta de automóviles alemana, fruto de la unión en el año 2000 de dos empresas familiares, Feser (Bernburg, 1929) y Graf (Fürth, 1947)- quiso obsequiar a los clientes que adquirieran un Audi Q7 en sus concesionarios ese 8 de marzo de 2006, con un detalle exclusivo: una figura Playmobil representando a un piloto de carreras, con los logos de Audi y Q7 en la espalda del mono. La tirada de este promocional fue muy corta, tan solo de 1000 ejemplares, lo que refuerza aún más su exclusividad y lo convierte en una pieza cotizada y difícil de conseguir.
